Me presento, soy Teresa, una chica de 24 años residente en Griñón (sur de Madrid).Conocí a Fatih mediante unos amigos, él es el presidente de la Asociación Hispano-Turca de Madrid. Me comentaron el proyecto que iban a realizar sobre la Tolerancia y el Diálogo intercultural en Aksaray (Turquía) y puesto que estaba subvencionado y nos íbamos a gastar muy poco dinero, no me pude negar. Conocer Turquía me llamaba mucho la atención y además, los amigos que me presentaron a Fatih repetían el viaje, por algo sería…El vuelo salía el domingo día 12 de Octubre de 2008.Volamos hasta Estambul donde pasamos nuestra primera noche en un hotel muy bueno que nos costó como unos 35E la noche por persona. Al día siguiente cogíamos otro avión hasta Konya donde nos esperaban unos amigos de Fatih que nos invitarían a comer, a tomar té, nos enseñaron la ciudad, nos invitaron a ver la tumba de Mevlana ‘Rumí’, nos hicieron regalos a cada uno….en resumen, unas personas maravillosas que nos decían que nuestras liras turcas no valían en Konya, vamos, que no nos dejaron pagar nada…

ya por la tarde, cogimos el autobús hasta Aksaray, donde íbamos a hacer el proyecto. Nos hospedamos toda la semana que duraba el proyecto en un hotel de 5 estrellas, donde no tuvimos que pagar nada. Los componentes del proyecto eran seis chicas de Dinamarca, tres chicos y dos chicas de Bulgaria, nosotros seis de España, y otros cinco chicos de Turquía. Por supuesto nos comunicábamos en inglés…Nuestro horario diario era de 9 de la mañana hasta las 12 más o menos, con un descanso entre medias de media hora, comíamos y de 4 a 6 también con descanso, y luego la cena y solíamos terminar. En las sesiones hacíamos actividades dinámicas, diálogos, videos, todo sobre la tolerancia, el respeto, las diferentes culturas….y cada día hacíamos, cada grupo, la presentación de nuestro país, con videos, folletos, regalos, comidas y bebidas típicas, trajes típicos, y lo que a cada uno se le pudiese ocurrir… Uno de los últimos días fuimos a visitar a una familia que vivía en Aksaray, la cual nos abrió amable y educadamente su casa ofreciéndonos té y dulces varios en platos individuales…conversamos durante más de una hora también con el padre que era policía y nos estuvo contando cosas de su trabajo a la vez que nos preguntaba por la situación de nuestros países…fue una de las experiencias que más gustó en general a todos los chicos del proyecto, mantener un contacto directo con otra cultura diferente a la propia… Otro día fuimos a ver la Mezquita de Aksaray e hicimos una visita a (…….) al cual pudimos preguntarle dudas que teníamos sobre su religión. Una visita muy enriquecedora también. Otro día fuimos a visitar la Capadocia, preciosa y impresionante. Y bueno, aparte de lo que conocimos culturalmente también tengo que mencionar las relaciones personales (algunos más, algunos menos) que tuvimos ocasión de tener con personas de diferente países, que aunque ha sido un trabajo de convivencia dejando a un lado la nacionalidad, religión, el carácter, ha podido servir para conocerte a ti mismo a la vez que a los demás… Bueno, la verdad es que podría estar contando mucho más del viaje, anécdotas, curiosidades, pero en resumen, para que te despierte la curiosidad y algún día seas tú quien cuente su experiencia de un proyecto intercultural de la Casa Turca, te diré que ha sido una experiencia única, una oportunidad de conocer un país a manos de una persona/s del propio país, que te lo recomiendo.

Bueno, tras el proyecto nos volvimos a Konya en autobús (otras dos horas) donde volvimos a encontrarnos con los amigos de Fatih de la otra vez, y esta vez también con sus niños de unos 4 años….nos invitaron a comer y tras pasar la tarde con ellos muy a gusto, cogimos el avión hasta Estambul, donde pasamos 3 días conociendo la abarrotada ciudad. La Mezquita Azul, Santa Sofía, Las Cisternas, Sultan Ahmet, el Bósforo, la Torre Gálata, el Gran Bazar, la comida, el ayran…y aunque nos quedaron cosas por ver, para un segundo viaje, yo me fui bastante satisfecha. También los hoteles donde nos alojamos en Estambul muy buenos y tampoco fueron muy caros.

En definitiva, nunca podré olvidar a las personas tan amables y educadas, así como atentas que he conocido en este viaje, en especial a nuestros ya amigos de Konya y a sus encantadores hijos, por lo bien que nos han tratado.

Y aunque les voy a ver con más frecuencia, quiero mandarles un besazo muy muy grande a mis amigos Patri y Vake, que fueron los que me avisaron para el proyecto, gracias chicos por pensar en mí en el momento adecuado, os quiero. También mandarles un abrazo a Mario y a Irene, que me gustó conocerles. Y un saludo muy especial a Fatih, que sin ti éste viaje no hubiese sido posible, te deseo todo lo mejor en tu vida y en tus proyectos, y espero verte pronto.‘‘